Primer concurso ganado de estas características, que en un principio solamente se trataba de una rehabilitación en una planta, y que al final nos llevó a actuar en todo el centro. El proyecto se dividió en tres fases, la primera de ellas, se trataba de actuar en los espacios comunes de El Rebost, parte comercial del centro que queda enterrada, y atravesada por un vial subterráneo que la divide. En una segunda fase se trataba de actuar en el resto de zonas comunes del centro comercial. En ambas fases se actuó en pavimentos, falsos techos, iluminación y revestimientos. Por último, se actuó en una tercera fase, en los accesos al centro, especialmente en las rampas al parking. En ellas hay toda una poética relacionada con las islas, con los cielos nocturnos estrellados, con la vegetación lujuriosa, con el faro, las cascadas de agua…. En colaboración con Octavio Mestre Arquitecto
